lunes, 12 de marzo de 2007

Lenguas.


Quien me conoce de toda la vida sabe que una de mis mayores aficiones y también una de mis mayores habilidades, de la que me enorgullezco, es la facilidad para asimilar y hablar lenguas extranjeras. Me he preguntado muchas veces por qué me interesan tanto. Y creo que es porque cada idioma es un mundo, un universo entero. Observa a un niño que está empezando a hablar: señala con el dedo los objetos más cotidianos y pide, exige saber cómo se llaman. Y experimenta un placer enorme al repetir esa nueva palabra -al principio con torpeza-, igual que disfruta cuando paladea un sabor nuevo. Eso mismo me ocurre a mí (me sigue ocurriendo después de tantos años) con cada nueva palabra alemana, inglesa o francesa que aprendo.

Jorge Luis Borges contaba que, cuando lo llevaban de niño a visitar a su abuela paterna hablaba con ella de un cierto modo, que no era el mismo que cuando iba a casa de la abuela materna: al hacerse un poco mayor se enteró de que con una hablaba en español, y con la otra en inglés. Quien tiene dos o más lenguas desde la infancia ha ganado sin darse cuenta varios tesoros.

Aprender una lengua es hacerse consciente de todo lo que se ignora. Cuando estudiamos otra lengua estamos implícitamente reconociendo el valor de otra cultura, de otra forma de ver las cosas, estamos demostrando un respeto por aquellos que son diferentes a nosotros. Cuando viajamos e intentamos comunicarnos con otros en otra lengua, somos conscientes también de la suerte de contar con un idioma propio que a su vez otros quieren aprender. Y paladeamos cada palabra...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

cierto primica,cierto, envidiable facilidad e interés por las lenguas,

Anónimo dijo...

Yo ya he llegado tarde. En mis tiempos lo de estudiar idiomas no era un bien común. Un poquito de francés y sobra.Cómo lo envidio. Sobre todo cuando viajo fuera de España.Menos mal que existe el lenguaje de los gestos que es internacional.Tienes razón, detrás de un idioma hay una cultura, unas costumbres, una historía....El idioma es la puerta que te permite entrar en ellos...Explorar,conocer,disfrutar....¿Será por elló que yo puse especial interés en que mis hijos tuvieran una enseñanza bilingüe? Enhorabuena por tu afición y facilidad por los idiomas