domingo, 30 de agosto de 2009

Digno de ser amado.

"Boy and girl"
Elsa Mora

EL COLOR Y LA MÚSICA DE LA VIDA


"Los diccionarios recogen que “amable” en su primera acepción significa “digno de ser amado”. Puede sorprender pero tiene mucho sentido.
Como denota su raíz (amar), lo amable es lo que merece o inspira amor, igual que lo agradable produce agrado y lo servible puede servir. ¿Qué mejor definición para las personas que demuestran interés por los demás y que desean ayudarles, aunque sea modestamente? Uno se siente inclinado a amarlas.
Vivimos en un mundo cómodo, muy atento a las necesidades materiales, pero a menudo falto de calidez, comprensión, generosidad. Se echan de menos personas de buen trato que demuestren que su interlocutor les importa, incluso si lo acaban de conocer. Da alegría encontrarse con alguien que manifiesta verdadero interés al escuchar y mirar a los ojos, que está dispuesto a echar una mano y no escatima afecto.
La cordialidad, las palabras y expresiones afables de las personas familiares o anónimas con las que uno se va cruzando a lo largo del día son las que marcan en gran medida el color y la música de la vida, y tienen la capacidad de cambiar nuestro humor incluso en las peores circunstancias.
Descubrir el auténtico regalo que son las personas amables invita también a convertirse en una de ellas. No faltan oportunidades para cultivar la amabilidad en lo cotidiano, con los demás y con uno mismo. Gestos muy simples, como sonreír al saludar, determinan el modo en que nos relacionamos y la respuesta positiva que probablemente obtendremos. No se trata sólo de ser educado y cumplir las normas (no molestar, respetar al otro…) sino de ir un poco más allá e intentar ayudar, sentir empatía, dar cariño. Aristóteles, en su Ética Nicomáquea incluyó la amabilidad entre las virtudes morales que definen al hombre bueno.
Puede ser un principio desde el que dirigir la vida: tener en cuenta a quien se tiene al lado, ocuparse de él. El Dalai Lama dice que su religión es la amabilidad. Tal vez la auténtica espiritualidad consiste sobre todo en esa disposición atenta y comprensiva."


Yvette Moya-Angeler

Revista Cuerpomente nº 208

7 comentarios:

Liliana Lucki dijo...

Dar,ayudar,ser amable y comprender.

Hace bien al otro,y mejor a nosotros.

Es de sumo placer ,saber que somos

seres amables y afectivos.

La vida de un modo u otro

lo devuelve.Pero no hay que esperar nada de nadie.

Solo ser digno de ser amado.

Saluda Liliana. Este espacio es hermoso.

Mermaid Lullaby dijo...

Gracias, Liliana. No sabes cómo me gusta compartir pensamientos interesantes con personas sensibles que los aprecian. Un abrazo.

aguadecolores dijo...

Precioso pensamiento, gracias por compartirlo.
Te dejo besos de colores amables y positivos.

inma valderas dijo...

Hace poco tiempo mi hijo me dijo que le gustaba estar con su abuela (mi madre), porque era una persona amable. Me sorprendió que resaltara especialmente eso, pues podía haber dado otras mil razones quizás más materiales.
Me di cuenta entonces que mi hijo valoraba lo realmente importante y comprendia que es un bien escaso.

Es importantísima esa amabilidad cotidiana,resulta increible como puede cambiarnos el día.

Espero que algún día mis nietos también me definan con esa palabra.

Besos

Graciela Bello dijo...

Me gusta mucho el concepto del Dalai Lama, mantener esa buena disposición con los demás no siempre es tarea fácil, requiere
constancia, sobre todo cuando no estamos de buen ánimo.
Los jóvenes de hoy creo que desconocen bastante la importancia de esta cualidad. Pareciera que los buenos modales son algo casi pasado de moda.
Yo la valoro mucho, es la herencia que he recibido de mis afectuosos y amables padres. Y me alegra que tú hables de esto y nos lo recuerdes.

Unknown dijo...

eah! Buscando imágenes de sirenas encontre tu blog. me gusto mucho! yo también me gustar las sirenas. sirenario.blogspot.com

un saludo!

Anónimo dijo...

La empatía es una de las virtudes que más valoro en las personas.
En latín, el nombre de mujer "Amanda" significa "la que debe ser amada", pero todas las personas de este mundo se merecen comprensión y amabilidad.