domingo, 25 de octubre de 2009

El sexo de los ángeles.

Adolphe-William Bouguereau
"Muchacha defendiéndose de Eros"
(1880)

"Una de las más lamentables carencias de información que han padecido los hombres y mujeres de todas las épocas se relaciona con el sexo de los ángeles. El dato nunca confirmado de que los ángeles no hacen el amor, quizás signifique que no lo hacen de la misma manera que los mortales. Otra versión, tampoco confirmada, pero más verosímil sugiere que, si bien los ángeles no hacen el amor con sus cuerpos por la mera razón que carecen de erotismo lo celebran, en cambio, con palabras, vale decir, con las orejas. Así, cada vez que Angel y Angela se encuentran en el cruce de dos transparencias, empiezan por mirarse, seducirse y sentarse mediante el intercambio de miradas, que, por supuesto, son angelicales. Y si Angel para abrir el fuego dice "Semilla", Angela para atizarlo responde "Surco". El dice "Alud" y ella tiernamente "Abismo". Las palabras se cruzan vertiginosas como meteoritos o acariciantes como copos, Angel dice "Madero" y Angela "Caverna". Aletean por ahí un ángel de la guarda misógino y silente y un ángel de la muerte viudo y tenebroso. Pero el par amatorio no se interrumpe. Sigue silabeando su amor. El dice "Manantial" y ella " Cuenca". Las sílabas se impregnan de rocío y aquí y allá, entre cristales de nieve, circula en el aire, sus expectativas. Angel dice "Estoqueo" y Angela radiante, "Herida", el dice "Tañido" y ella dice "Relato". Y en el preciso instante del orgasmo intraterreno, los cirros y los cúmulos, los estratos y nimbos se estremecen, entremolan, estallan y el amor de los ángeles llueve copiosamente sobre el mundo."

Mario Benedetti

2 comentarios:

M.D.Meridio dijo...

El sexo de ángeles o el poder de la palabra. Precioso texto de Benedetti. Su prosa irónica me gusta tanto como su poesía. Aquí, por ejemplo nos deja una nueva forma de sexo oral muy comunicativa e intencionada en cada palabra. Al final acabas leyendo a toda velocidad…

"Y en el preciso instante del orgasmo intraterreno, los cirros y los cúmulos, los estratos y nimbos se estremecen, entremolan, estallan y el amor de los ángeles llueve copiosamente sobre el mundo."

Síííííí!!!!

Mermaid Lullaby dijo...

La a menudo mal entendida sencillez de Benedetti, esa forma casi ingenua de expresarse, es para mí a veces como una bocanada de aire fresco. Me imagino a ese viejito, que sufrió el exilio y la dolorosa muerte de su mujer, tras el cruel Alzheimer, leyendo sus escritos con ese acento cadencioso, y siento por él una simpatía que va mucho más allá de su trabajo de poeta izquierdoso.

"La sencillez es una de las virtudes más complicadas de este viejo mundo." - decía el poeta- "Cuando uno es sencillo (en su habla, en sus actos, incluso en su poesía) corre el incómodo riesgo de ser tomado por tonto, por babieca."

A mí, como a él, cada vez me alivia más la sencillez y cada vez desconfío más de lo enrevesado.