sábado, 26 de junio de 2010

...y otra Luna llena...

"Hombre y mujer contemplando la luna"
1830-1835
Caspar David Friedrich

En 1870, el poeta francés Paul Verlaine contrajo matrimonio con la adolescente Mathilde Mauté de Fleurville. Ese mismo año publicó su colección de poemas "La Bonne Chanson". En ellos describe con enorme intimismo y emotividad su encuentro con la amada y los paisajes en los que se desarrolla su amor y la unión con Mathilde.

El entusiasmo amoroso, la serena melancolía y el deseo de atrapar esos instantes, dominan los versos de Verlaine. Uno de estos poemas, "La Lune Blanche", es un buen ejemplo de ello.
En sus breves estrofas, el poeta refleja la apacible quietud y la belleza de la naturaleza, como metáfora de los sentimientos que estaba experimentando, y define como "hora exquisita" ese momento de "vasto y tierno sosiego" en que se encontraba su alma.

Fueron numerosos los músicos que quedaron atrapados por la poesía de Verlaine, y usaron sus versos para componer canciones, muchas de las cuales constituyen algunas de las piezas más emblemáticas de la música francesa de principios del siglo XX. En concreto, el poema "La lune blanche" fue objeto de múltiples versiones, como la de Gabriel Fauré o la de Reynaldo Hahn.
Entre las "Cuatro Melodías" que componen la Opus 13 de Ernest Chausson, encontramos también su particular visión del poema de Verlaine en esta "Apaisement":



La Lune Blanche

Paul Verlaine

La luna blanca
luce en los bosques;
de cada rama
parte una voz bajo el ramaje...
Oh, bien amada.
El estanque refleja,
profundo espejo,
la silueta
del sauce negro
donde el viento llora.
¡Soñemos, es la hora!
Un vasto y tierno
sosiego
parece descender
del firmamento
que el astro irisa.
Es la hora exquisita.

3 comentarios:

Mavi Spagnuolo dijo...

que lindo homenaje a la luna llena.... siempre dando tanta energia y tanta belleza.... saludos, mavi

Mermaid Lullaby dijo...

Cómo me gustaría que más gente apreciara la belleza de una pieza musical, de una voz femenina, de un poema, como tú lo has hecho. Pero sé de antemano que, con frecuencia, esa belleza pasa desapercibida para la mayor parte de las miradas, y desaparece, sin dejar ni huella para esos espíritus duros e insensibles. Ellos se lo pierden!
Saludos y muchas gracias.

Graciela Bello dijo...

Por este post y tantos otros dedicados a la luna y a la belleza, hoy te deseo un FELIZ CUMPLEAÑOS!!!! Y te dejo una de mis lunas pintadas en mi blog, con mucho amor.