Desde la serena profundidad
de los ojos del niño,
surgen, de pronto,
las temidas palabras:
¿Dónde está papá?
Y la esposa llora
la ausencia del compañero,
y la mujer siente
que su corazón se desgarra,
y la madre abraza
con la ternura de todas las madres
la dulce fragilidad de su hijo
mientras, temblando,
oye resonar de nuevo
las terribles palabras.
¿Dónde está papá?
La esposa, la mujer, la madre,
finge entonces que no oye,
y el niño, en su sabia inocencia,
sonríe a su madre
desde su limpia mirada.
Una vez más, ambos se abrazan,
cómplices para siempre,
náufragos del destino,
en un mar gris e inmenso
de injusta desesperanza.
2 comentarios:
gracias primica,te quiero un montón,BESITOS.
El amor de una madre no conoce límites, no tiene fronteras....Una madre abraza, arropa ,acaricia a un hijo y éste se siente tan feliz que no advierte el hueco que marcó una ausencia.Y la madre acariciando, besando,ofreciendo, dando... se olvida de todo para, a su manera, ser feliz.Sólo las madres son felices dandolo todo a los hijos....
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