viernes, 1 de julio de 2011

Dickens frente al mar.


Cuando Charles Dickens llegó a Broadstairs, un pueblecito costero al este del condado de Kent, tenía veinticinco años y ya era famoso como autor de los ”Pickwick Papers”, una novela por entregas que estaba a punto de completar. Alquiló una casita en la 12 High Street y se puso a trabajar en el final de la historia. Dickens volvería una y otra vez a Broadstairs hasta 1851.



La casa, hoy convertida en museo, pertenecía a Miss Mary Pearson Strong, la cual sirvió a Dickens como inspiración para el personaje de Miss Betsey Trotwood, tía abuela del famoso David Copperfield.

Los guías del museo son dos abuelitos con barba blanca y ojos azules, que en un inglés que parece copiado de una novela del mismísimo Dickens, narran con paciencia y pasión –mientras les brillan los ojillos azules- la vida y obra de este genio de la literatura victoriana. Durante la visita, el primero de ellos, me pide permiso para coger mi mano – “Can I take your hand, Miss?”- y la coloca sobre el escritorio original de Dickens. “Now, you can say you´ve come into direct contact with Mr Dickens. Not everyone can say so!” ( Ahora ya puede decir que ha tenido contacto directo con el señor Dickens. No todo el mundo puede decirlo!)

Todavía con la sensación de haber viajado atrás en el tiempo hasta el siglo XIX, salgo de la ilustre casa y recibo una bocanada de aire salado, refrescante, conocido y nuevo a la vez. Porque esta orilla suena también a gaviotas, a olas y espuma de mar, pero no es la mía. El Mar del Norte me llama hasta la misma orilla, y me susurra que es un mar hermano, y me da recuerdos para mi Mediterráneo. Y me lo dice con un azul distinto, y con un acento británico con el que seguramente ya se dirigió antes al Sr. Dickens. Un honor compartir la voz del mar con él.



Vuelvo a Canterbury con el aire marino agarrado al cuerpo, saciada de sal y caracolas, agradecida a este mar inglés, y encuentro a mi llegada a Canterbury un precioso regalo:



Such a perfect day!


8 comentarios:

montse dijo...

Estas me han tocado. Copperfield era una de mis lecturas infantiles. Hermosas fotos.

Graciela Bello dijo...

AHHHH! Qué hermosa visita! Me ha conmovido más que Canterbury!
Qué bello lugar!!!
Dickens y sus novelas tan sentimentales, como "Grandes Esperanzas", nos han marcado la juventud. Es muy emocionante conocer el espacio donde se habrá inspirado para crear algunas de estas historias.
Gracias por compartirlo!

Mermaid Lullaby dijo...

Y qué me decís de Alicia, y de La Isla del Tesoro, del Dr Jekyll, de Drácula, del Fantasma de Canterville, de Sentido y Sensibilidad, de Sherlock Holmes, del mismísimo Jack el Destripador... Y, por supuesto, de Oliver Twist, de David Copperfield.
Hay tantas historias y tantos personajes que nos han marcado a todos, y que tienen mucho que ver con Inglaterra, y con esta misma época!
Fue una visita muy especial que recordaré durante mucho tiempo.

Y mañana celebraré mi cumpleaños en Londres. Eso tampoco lo puede decir todo el mundo!

Kisses and hugs, my friends!

MARIA JOSE ABAD dijo...

felicidades otra vez,, disfruta de tu día en londooonnn!!!! me encanta,, besos.

inma valderas dijo...

¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS!!!

Espero que este día sea tan especial como el que describes en el post.Va a ser un viaje inolvidable.
Seguro que en casa te guardan la tarta hasta la vuelta !!!

Un montón de besos

Clarissa Rodriguez dijo...

Feliz cumple!!!!
Espero que te hayan saludado con cantos dignos de una sirena.
¡Que Dios te bendiga!

Mermaid Lullaby dijo...

Las sirenas se morirían de envidia...
Llevo toda la tarde llorando como una tonta.
Muchísimas gracias por vuestra compañía en un día tan bonito.

cronopia dijo...

Sorry! Llego tarde. Estuve fuera estos dos días pasados.
Feliz cumple, guapísima!
Siento haberme retrasado.
Besos